martes, 1 de diciembre de 2009

En búsqueda de algo llamado...X

Quiero tener un sexto sentido, quiero averiguar qué es lo que escondes detrás de esa mirada, detrás de esa sonrisa, detrás de esa palabra sin acabar…quiero ser yo quien mime tus noches solitarias, quiero ser yo quién adivine tus pensamientos…pero quiero ser yo quien se descubra a sí misma.



Puede ser miedo, pánico, PAURA…ya lo sé…no tengo remedio, pero no volveré a pasar por ahí…puedes sentirlo, pero déjate llevar…siempre la constancia arrastró dolor, pero si la palabra AMAR es el comienzo de la palabra amargura, ya no hay miedo, podemos llorar, podemos reír, podemos volvernos locos, desquiciarnos, pero…¿y qué?...dime, dime…¿y qué más da si pierdes la cabeza por ella?...



Estamos de acuerdo en eso, no hay peor condena que caer enamorado y no poder despertar de ese sueño agridulce, pero por mucho que llueva durante esa condena, por mucho que diluvie, por muchos rayos, relámpagos que caigan desde el cielo…siempre llegará la calma y aparecerá el arcoiris…el arcoiris que sellará tu sonrisa permanente, el brillo de tus ojos y la eterna felicidad.



Puede que no busquemos esa felicidad, puede que lo único que pretendamos sea sentirnos queridos…puede que el amor no exista, puede que el estar enamorado se reduzca a una simple chispa instantánea de conexión que forzamos a que dure durante tiempo, más tiempo…tanto tiempo que hacemos que forme parte de nuestra vida y que luego nos resulte imposible vivir sin él…¿estaré en lo cierto? ¿Formamos parte de un engaño contínuo que permanece per se en nuestras vidas?



Si buscas una respuesta, aquí no la encontrarás…si pretendes hallar una solución a tus dudas, no te molestes, lo que cada instante te marque el corazón es lo que tienes que seguir…dicen que las personas impulsivas, las apasionadas que disfrutan y sufren con cada una de las cosas que hacen y dicen, somos las que más sufrimos….pero…che cosa? Sinceramente…me da igual…¿que sería de mí sin creer firmemente en mis decisiones, sin estar segura de cada paso que doy, sin llorar de risa por los chistes, sin llorar de pena porque un perro aparezca muerto en la carretera…?No sería nada…para pasar sin pena ni gloria por esta vida…mejor nos quedamos quietos… ¿o no?