viernes, 13 de febrero de 2009

UN PASEO POR LAS ESTRELLAS

Porque esta vez así es…porque esta vez no ha sido un sueño…hoy he escuchado en una entrevista que los guiones tienen que ser verosímiles, lo que no quiere decir que tengan que ser reales…hay veces que la vida es bastante inverosímil, por lo tanto, según mis cuentas, la vida es más irreal que un guión de cine…

Como os decía, esta vez ha sido verdad, no ha sido necesario que alguien toque la puerta de mi habitación y me diga: TERESA, que son las nueve menos cuarto!!!, ahora soy yo la que he vivido en mi piel esa realidad, esa realidad que tanto anhelaba…

Es verdad, señores incrédulos, esta vez ha sido verdad, y os preguntaréis que qué es eso que tanto deseaba y finalmente he vivido: PASEÉ POR LAS ESTRELLAS…sí, sí…siempre he creído que ellas se escondían para que no las descubrieran, iluminan para que nosotros desde aquí abajo las contemplemos pero no sepamos nada más de ellas, al contrario que ellas: ¡qué cotillas! Nos ven las 24 horas del día y sin preguntar, si acaso, son capaces de conocer al detalle nuestra vida y nuestros más profundos miedos…y es cierto…alguien me dijo una vez que yo me mostraba como una de esas estrellas, me gusta observar y ver lo que pasa…pero sin dar muestras de lo que pienso…en pocas ocasiones me he mostrado así… pero esa vez sí que era cierto.

Pues así les sigo contando mis queridos pequeños, cuando paseé por las estrellas, primero entré en contacto con las nubes, seguidamente me vi inmersa entre un color blanco parecido al del algodón de azúcar que venden en las ferias… ¿lo recordáis? salvando la diferencia del color rosa que le proporciona ese sabor tan peculiar…que algunos lo califican como empalagoso…sin embargo, a la que escribe nada que resulte dulce puede convertirse en empalagoso…

Y allí, allí me hubiera quedado, creo que una de esas estrellas que habitaban esa noche en el cielo me hizo un guiño, pero la muy coqueta corriendo lo borró de su rostro para no ser descubierta…menos mal que yo fui rápida y lo capté al instante…con eso me quedo…con ese guiño y con ese paseo por las estrellas…donde esta vez descubrí aquel lugar en el que las estrellas SÍ pueden ver…

1 comentario:

Esperanza Escribano Claramunt dijo...

Con todo esto se confirma mi teoría...vales más que las estrellas; ésa es mi opinión, y me encanta haber encontrado ese lado oscuro que en el fondo todos tenemos, pero sólo algunos locos descubren de verdad, y tienen el par de...para mostrarlo. Eres una genia.