PONGAMOS QUE HABLO DE MADRID...

Porque ya ves que no hay dos sin tres…que la vida va y viene, que no se detiene…qué sé yo…¿qué opinas? No sé…¿la vida no se detiene?¿no hay momentos de los que te encantaría escapar y en los que te encuentras prisionera sin poder huir? Qué sé yo…

Vámonos pa´Madrid…y tanto que nos fuimos…pero ¿quiénes?, tú y yo, pues claro, si siempre vamos juntas…¿juntas o juntos? ¡¡Ay!! pues no sé…da igual, como no queremos que haya machismo en el lenguaje, dejémoslo en juntas, ¿te parece?

Allí que nos fuimos, qué valientes nosotras…con la maleta en esa gigantesca puerta y diciendo adiós a aquella mujer a la que la única gota de agua que le quedaba en su cuerpo estaba a punto de esfumarse evaporada por esos brillantes ojos. Mientras, tú y yo, frente a frente, tú, haciéndote la dura…y yo, llorando como una descosida y queriendo montarme en el coche de vuelta a casa, de vuelta a todo lo que tenía allí, con todo lo que me había envuelto desde que nací…¿y por qué no te montaste? ¿cómo que por qué? Porque tenía inquietudes, quería ser una Leticia Ortiz, la reina de la televisión…¡qué inocente eras, bueno…y lo sigues siendo!... Alguien me dijo una vez que de ilusiones también se vive, qué triste sería la vida sin ilusiones ¿no?...Bueno, pues aquí nos hemos quedado…será porque no está del todo mal ¿no?... ¿Pero no echas en falta el ambiente que teníamos allí, y nuestras amigas? ¿y aquel chico que te enamoró? Bah, claro que sí, claro que las echo de menos, pero siguen aquí, en el corazón…¡Venga, que ahora la niña se pone melancólica!...es verdad, jolín, sé que me siguen queriendo tanto y cuentan conmigo para todo…yo sabía que aquello no podía acabar…y por lo demás, todo pasajero, no hay mal que cien años dure…

Allá donde se cruzan los caminos…donde el mar no se puede concebir…donde regresa siempre el fugitivo…pongamos que hablo de MADRID…¿y no te agobia esa ciudad?, con tanto metro, la gente parece que va como loca de allí pa`cá…a nadie le importa nada de los demás, cada uno sigue su camino…y ¿qué me dices de la chulería de los madrileños? Seguro que ninguno es de fiar…Ya estamos, esto es igual que si dices que los andaluces no trabajan, pues no es verdad, los madrileños a los que he conocido son encantadores, claro que tienen un pequeño baño de chulería, pero como los andaluces de graciosos, nada tiene que ver, yo me he encontrado con chicos especialmente sensibles y muy muy madrileños, y chicas con un estilo muy de la capital pero adorables…en serio, la vida aquí no está tan mal, todo lo contrario, abres tu mente, lo que antes te parecía muy lejano, aquí ves que no lo es tanto, en ocasiones, he abierto los ojos varias veces para despertarme, porque estaba soñando, pero soñando despierta…

Aquella ciudad de los cerros de la que salimos hace ya tres años sigue siendo igual de especial para mí, pero por supuesto, que cuando vuelvo a ella, voy cargada de nuevas experiencias que no me habría aportado otra ciudad que no fuera ésta…puff..¡qué filosófica!, entre los tés o cafés de por la mañana y este rollo que me has soltado, estoy pensando en si podríamos separarnos por una temporada…no me gusta tanta ñoñería…y ¿si me voy a Tenerife?